Los potenciales escondidos. La amnesia y la brillantez.
Hay una pregunta que siempre viene a mi mente y de forma
repetida, ¿Qué tipo de amnesia nos
implantan cuando reencarnamos?
En muchas ocasiones nos damos cuenta que tenemos un tope en
nuestra mente que de manera instintiva nos hace contradecirnos. Ese momento donde la cabeza te dice una
cosa y tu instinto la contraria. Justo en ese punto me lleva pensar que ese
chip ha sido borrado intencionadamente. Me refiero al chip de la memoria
ancestral.!!!
La astrología nos abre esa puerta borrada y nos indica por
donde tenemos que caminar para volver a reconectar con nuestra sabia alma.
En la carta natal tenemos muchísimos potenciales dormidos y
escondidos de los que no hacemos uso por no tenerlos en el consciente, no por
ello se mal usan, solo es que no se usan……
Gran Trígono de aire
Me llama mucho la atención cuando levanto una carta donde
hay un gran trígono de aire (formación
de gran triangulo) y la persona no es capaz de darse cuenta de tal potencial y
vive sumergido en su energía utilizando
muy poco porcentaje. Es como tener una caja de herramientas con 1000 piezas y
solo coges tres, quedándose sin saber cuales son las utilidades del resto. Esto
ocurre porque la persona se hace cómoda, internamente sabe que las tiene pero
nos las utiliza.
De otra manera , los sujetos que lo usan suelen ser
verdaderos virtuosos, grandes escritores, comunicadores, periodistas,
locutores, oradores, poetas, etc…..
Gran
Trígono de Aire
(Un gran trígono de aire se dibuja cuando tres planetas
conforman los vértices de ese triangulo desde los signos Géminis, Libra y Acuario. Esta dotado de una mente brillante, gran capacidad de razonar, una fluidez innata para verbalizar y comunicar)
EXPERIENCIA PERSONAL.
Voy a relatar una experiencia personal con la formación de
este GRAN TRIGONO (gran triangulo) por la configuración de los planetas en
transito (movimiento de los planetas en el cielo) hacia mi carta natal, dándome ese súper brillantez momentánea. No poseo natalmente de ese gran regalo.
Hace unos años un domingo cualquiera, me llama una amiga
porque había pasado algo muy extraño en su casa, me pide que vaya lo antes
posible a su casa pues necesita ayuda urgente.
Cuando llego a su casa me encuentro que se ha cometido un
robo y ella no tiene consuelo, en ese mismo momento llegan dos personas más
para ayudarla y mi instinto me dijo que todo el mundo era culpable hasta que se
demostrase lo contrario. Ella muy abatida me mira con los ojos llenos de lágrimas
y en ese instante le digo en baja voz: observa y piensa.
De forma muy inocente empiezo hacer preguntas y me doy
cuenta que estas dos personas de su confianza, no son claras en sus respuestas,
de hecho una de ellas me invita a que me vaya pues el hecho es algo que no me
concierne, no soy persona de meterme donde no me llaman, pero era una amiga y
necesitaba ayuda de alguien con más objetividad y templanza. Algo internamente
me decía que no me fuera.
Después de un largo rato y de una gran observación me fui a
mi casa y me quedé pensando y meditando, cojo el teléfono y llamo a mi amiga
que aún seguía llorando y le empecé a desgranar lo que había observado y pensado
acerca del robo. Ella quedó perpleja, diciéndome que todo tenía mucho sentido y
que llevaría a cabo mis recomendaciones.
Dos días después me
llama de nuevo y ¡cual fue mi sorpresa!, no me había equivocado en el Quien, Donde, Cuando y ella muy
agradecida me alabó diciendo lo astuta y
lista era. ¡Había aflorado mi vena
detectivesca!.
Al cabo de unos días se me enciende una bombilla y voy a mi
carta y busco los tránsitos (ubicación
de los planetas en ese momento) sobre mi carta natal y voilaaaaaa , tenia un
gran trígono de aire en mi carta formado perfectamente.
Después de una experiencia como esta he llegado a una
conclusión base de la energía de la brillantez y el instinto. Si tu mente te
falla, tienes el instinto, no lo desobedezcas el tiene guardado tu sabiduría
ancestral. La combinación de ambos es el equilibrio justo para poder llegar a
muchas conclusiones de ese puzzle llamado vida.
Gracias por existir.
COMPRENDERLO TODO ES
PERDONARLO TODO (Lev Tólstoi)
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